Arriba de un escenario o adelante de una cámara lo que uno anhela es ser memorable, es poder transmitir esa historia, la historia de ese personaje de la forma más real y honesta posible.
En esta técnica nosotros trabajamos en la búsqueda de esta autenticidad. Trabajamos en entender quién somos para poder brindarle a nuestros personajes esa expresion de la verdad en forma única y original que sólo nosotros podemos traer, ya que somos únicos como nuestras huellas digitales.
La historia del cine y la televisión está llena de actores que hicieron papeles que no fueron inicialmente hechos para ellos, algunos ejemplos son:
1- La saga de Indiana Jones que lo catapultó a la fama a Harrison Ford, fue originalmente ofrecido al actor de Magnum PI, Tom Selleck que por cuestiones de contratación no pudo aceptar.
2-El papel que hace Keanue Reeves en The Matrix, habia sido ofrecido inicialmente a Will Smith.
3- El papel de Tom Hanks en Forest Gump fue originalmente ofrecido a John Travolta, etc etc.
Hoy no nos imaginamos estas peliculas con otros actores que no sean los que la hicieron. La realidad es que seguramente hubieran hecho un buen trabajo esos actores pero el resultado final hubiera sido diferente aunque el guion sea el mismo. Porque? Porque cada uno trae a su trabajo lo que los hace unicos y originales. Traen su propia interpretacion y su propia vida emocional, su esencia.
Para ser memorable tenemos que ser honestos y reales, conectar desde un lugar muy profundo y nada superficial. Tenemos que creer en nosotros y perder el miedo a expresarnos, a experimentar y SER. Lo que admiramos de los actores que seguimos es que ellos traen su ”huella digital” a sus trabajos. Eso es lo que queremos ver, lo que los hace unicos a ellos. Lo que hace que nosotros los identifiquemos aunque esten disfazados.
